Menorca
En 1993 Menorca fue declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco. Para los amantes de la arqueología, tiene una importancia excepcional la cantidad de vestigios prehistóricos que se encuentran en Menorca, hasta el punto de ser considerada «museo prehistórico al aire libre».
En Menorca se vive a un ritmo tranquilo, con clima templado y sorprendente paisaje lleno de playas para todos los gustos, largas y de suave arena, hasta recónditas calas donde bañarnos en sus cristalinas aguas de tono turquesa. Los fondos marinos son de una gran riqueza ambiental, por la gran variedad de especies marinas.
Paseando por el casco antiguo de Maó, su capital, nos da la oportunidad de observar los edificios modernistas (casa Mir), las espectaculares casas señoriales, sus maravillosos miradores, o su zona del puerto con ambiente cosmopolita, lleno de cafés y restaurantes.
El caballo es el protagonista de todas las fiestas populares, sus jinetes, vestidos de blanco y negro adornados con lazos, bordados y claveles multicolores, reviven cada año un ritual que nace a principios del siglo XIV.
La cocina menorquina es totalmente mediterránea, hecha a base de ingredientes naturales y frescos de la tierra y del mar.
Menorca ofrece inmejorables oportunidades de combinar el deporte con el disfrute de la naturaleza. actividades como el windsurf, la vela, el esquí náutico, la pesca deportiva, el submarinismo, la hípica, el ciclismo, el buceo, el golf ó el senderismo.
Menorca es el lugar ideal para perderse unos días de vacaciones y olvidarse de todas las preocupaciones.